Mateada entre tres (Privado con Argentina y Chile)

Mi jefe al parecer se entero de mis varios intentos de escapar de mis vecinos y decidió que eso no estaba bien - No es bueno que solo te veas con Argentina, deberías tratar de pasar tiempo con otros de tus hermanos - lo dijo con ese tono tan tranquilo y cara de bueno que no pude más que ir a mi oficina, agarrar la guía y empezar a llamar, como tenia ganas de tomar mate, decidí llamar a mi molesto aliado y a Paraguay. Cuando Paraguay me dijo que estaba ocupado trate con Chile con quien ya había estado en el café.
Sé que reunir a Chile con Argentina era una mala idea pero en ese momento ya había quedado con Argentina, fue un error llamarlo primero pero es que por orden ortográfico él estaba antes que Paraguay.
Quedamos en vernos a la hora de la merienda y siendo tan civilizado como soy fui antes para preparar todo, lleve mi equipo para tomar mate con el termo que tenia los colores de mi bandera y el porongo que era de lo más típico.
Me senté y para perder el tiempo saque un libro del señor de los anillos que había empezado y me quede esperando.

Estaba aburrido en casa, tirado en el sillón, comiendo bananas con dulce de leche ARGENTINO cuando sonó el teléfono. Me limpié las manos con el repasador antes de atender y darme cuenta que era mi uruguayito querido, invitándome a tomar mate con Paraguay en la cafetería de España. ¿Para que demonios irnos tan lejos solo para tomar mate entre los tres? Podríamos habernos juntado en la casa de alguno de nosotros... bueno, en la de Paraguay no. Tenia demasiados recuerdos dolorosos como para quedarme allí.
Así que me tomé un avión y llegué a Madrid, puteando por tantas horas de viaje, pero bueno, ni modo. Al llegar a la cafetería, lo vi a Sebas, leyendo tranquilamente el Señor de Los Anillos. Inglés tenia que ser el libro. Me acerque muy despacio, le arrebate el libro de las manos y lo bese.
Hola lo salude sonriente, pasándole una mano por el pelo y sentándome, sin devolverle el libro ¿ Todavía no llegó Paraguay?

Me agarro por sorpresa, solo por eso pudo Tincho sacarme el libro, el beso me hizo sonrojar y que lo empujara. En serio sabía hacerse el galán y hacerse el simpático sonriendo como un idiota ya para colmo me desarreglo el pelo, no sé para que me gasto arreglándome para ir a ver a mis familiares
- Hola, no me desarregles el pelo idiota -

No le pude responder donde estaba Paraguay porque justo llego Chile y después de saludarme le dijo algo a Tincho, algo que estoy seguro es un insulto pero estando ofendido como estaba no lo defendí.
- Perdonen por no decir que Paraguay me había dicho que no podía, pero mi jefe quiere que vea gente de nuestro continente y no le puedo decir que no - puede que quedara como si le tuviera miedo pero lo que me provocaba era ternura.

Como siempre que pasaba al besarlo en lugares públicos, me empujó. Acto seguido, comenzó a refunfuñar por desarreglarle el pelo.
No seas maricón comencé a decirle, pero me interrumpió la llegada de...¿Chile? ¿ Qué mierda hacia ahí?
¡Me mentiste, Sebastian! le dije, dolido por el engaño. Solo lo llamaba así cuando estaba dolido en serio. Sebas explico que Paraguay no había podido venir y había invitado a Chile por eso.
Pudiste haber llamado a cualquier otro, como Bolivia o Colombia reproche ante mi novio
Hola, pelotudito. Créeme, nadie lo lamenta tanto como yo esa fue mi respuesta a su saludo de porquería. La verdad, Sebas fue muy, pero muy hijo de puta al invitar a ese traidor imbécil amiguito de Inglaterra.

Me dolió que me llamara Sebastian, solo me llamaba así cuando estaba enojado, cosa que no era muy común para el idiota.
- No te menti, te llame antes de llamara a Paraguay y me dijo que no podía venir, trata de portarte bien - lo mire como tratando de advertirle que le iba a ir mal si se portaba mal.

Me puse rojo cuando mencionara a otras personas que pude haber invitado - Sé que vas a decir que fue muy idiota que lo invitara pero ya estamos acá, así que compórtate para que no nos echen -

En eso Chile me preguntó si esto era idea de mi jefe -No puedo decirle que no a Pepe, es muy bueno, por favor no se peleen - trate de poner cara tierna esperando ganarmelos a los dos para que no peleen.

No pude menos que enojarme cuando me dijo "Portate bien"
No soy un pendejo, Sebas le señale, intentando no parecer tan enojado, no delante de Chile Y si, sos un maldito idiota y se que lo hiciste para fastidiarme, trayendo a este... traidor.
Dicho esto, me cruce de brazos e intente no mirar a Chile, que comenzó a hablar con Sebas sobre Pepe. La verdad era que el tipo era una persona muy humilde y todo, muy diferente a mi jefa, que tenia de todo menos humildad, pero bueno, me tenia que conformar con lo que me tocaba. Mi gente la puso allí.
Me muero de hambre, Sebas, llama al mozo le dije, aun fastidiado. Pero debería hablar con el chileno, si no queria que mi novio se pusiese triste, así que, como para decir algo, le dije a Chile:
Podríamos haber ido a La Perla de Once, ahí si sirven mate... pero vos no tomas mate, ¿verdad? le dije, de manera cortes, pero dejandole entrever mi desagrado.

Spoiler:

Me tape los ojos no entendiendo que le había poseído para invitar a esos dos idiotas a tomar algo.
Negué con la cabeza no sabiendo si echarlos a los dos.

En lugar de eso saque el equipo de mate que había llevado y lo puse a la vista de los idiotas, -No sos el único que toma mate, hasta Paraguay lo hace, solo que le pone jugo - puse una cara de asco al recordar como sabía eso.

Mirando a Chile le dije - Perdón que te corrija pero el que hace eso soy yo ya que el mate es más mío que de él - sabía que eso llevaría a una pelea pero no me importaba el mate era cosa mía, esta yerba iba a ser la mejor que probaran, no esa cosa llena de palos de Tincho.

Mi primera imagen que se me vino a la cabeza al decirme que andaba con el termo y el "vasito" me dieron ganas de tirarle agua hirviendo por la cabeza, pero no tenia nada a mano para hacerlo y estando Sebas presente, mejor ni intentarlo.
No lo sabia solo atine a decir entre dientes. Encima no sabia ni hablar. Apenas entendia lo que decia el imbecil ese.
Sebas saco el equipo de mate y sonrei, en parte porque mi novio sabia lo que me gustaba y en segundo lugar porque ahora si podia tirarle agua hirviendo al chileno de quinta.
Cuando escuche que hablaba mal del mate de Paraguay le dije a Sebas Nah, no es tan feo, no exageres, sos re cerrado. Incluso yo lo preparo con leche a veces
Me enardeci al ver como le decia a Chile que el mate era suyo Perdon, pero el mate es mio le dije, imitando su acento Pero no me sorprende, siempre queres darte merito por cosas que son mias, como el tango y el dulce de leche. Si queria pelea, pelea le iba a dar.

Por lo menos Chile estaba siendo algo protocolar, si era por el idiota de Argentina íbamos a estar peleando hasta el día del juicio final.
- Traten de no pelear por favor y yo no soy cerrado solo que no me gusta como él lo hace, nada más - queriendo sonar culto, aunque la verdad no sabía porque me esforzaba con esos dos idiotas que solo sabían pelearse.

Mire a Manuel interesado no sabiendo que era lo que querría comer - podes pedir eso, si tienen mejor porque no me acuerdo haber comido dulce de leche en este lugar pero pueden tener - no me daba vergüenza admitir que no tenia idea lo que era el manjar.

¿Que no me enoje? ¿¿Que no me enoje??
Manjar murmure, enojado Nombre horrendo que le pones a mis cosas le dije, conteniendome para no pegarle. Levante la mano para llamar al mesero Traeme pan y DULCE DE LECHE dije, acentuando bien las ultimas tres palabras.
Una vez que se retiró, les dije a ambos, como para tirar un dato El mate tiene su propio lenguaje. Cuidado como lo sirven o podria haber malentendidos

En serio estaba hartándome de todo esto, en serio estaba soportando mucho solo por mi jefe y eso solo porque me estaba cayendo bien.
- Por favor no digas estupideces y no grites - mierda que era molesto estar con él y la verdad es que no sabía porque lo querría tanto.

Se rio cuando Manuel le diera la razón - Otro día podemos tomar un poco de clerico - la verdad es que si eso seguía así iba a tener que tomar algo fuerte.

Lanzé un bufido al escuchar a Manuel, pero me enoje de verdad al escuchar a Sebas.
Eso no fue lo que me dijiste anoche, amorcito le dije, apretando los dientes, sabiendo que eso lo iba a enfurecer y a avergonzarlo Podríamos, pero este chileno se va a chupar la vida le advertí a mi novio, mirando de reojo a Manuel.
El mozo llego con el pedido y el agua hirviendo para el mate. Fui el primero en agarrar el mate, ponerle yerba y llenarlo con el agua bien hervida. Se lo pase a Manuel, con la cara mas neutra que pude, a ver si captaba la indirecta.

Lenguaje del mate: